¿PORQUÉ EL CAPITALISMO PUEDE SOÑAR Y NOSOTROS NO?

¿Porque el capitalismo puede soñar y nosotros no?

Acerca del libro de Alejandro Galliano

Por Gabriela Bazan*

Desde el título la pregunta es por los futuros que nos esperan, pero que más que nada se construyen desde hoy. El autor le pregunta al presente, lo quiere interpretar buscando en los elementos del presente. Los que ya estaban e intensificó la pandemia y los rastrea en una secuenciación probable de las etapas del capitalismo. El libro es su primer parte resume desde la mirada de la historia las principales transformaciones económicas, tecnológicas y sociales de los últimos tiempos; y las causas y consecuencias de la etapa actual del capitalismo, es decir el “capitalismo 4.0”.

El autor hace una clara y concisa periodización de este fenómeno afirmando que la industria 1.0 habría surgido en 1784, con el primer telar impulsado a vapor; la industria 2.0 en 1870 con la aparición de la primera cinta transportadora eléctrica y el procesamiento en serie que terminaría en la cadena de montaje fordista; la industria 3.0 en 1969 con el controlador lógico programable  que dio inicio a la automatización digital;  y finalmente la industria 4.0, que aparece en la década del 2000 con la web 2.0 y el desarrollo de la inteligencia artificial. Por otro lado, hace hincapié en como este proceso económico de la industria 1.0 pero principalmente la 2.0, moldeó a la sociedad y a sus instituciones hasta nuestros días.

Con respecto a la industria 4.0, el libro detalla como la contracultura de los 70 y el repudio a la organización fordista de la vida, fueron algunos de los procesos sociales que se presentaron como antesala de esta actualidad. Podemos agregar además que el giro del modelo de producción fordista al posfordista se da finales de los 70 y principios de los 80, fenómeno que se de manera desigual y heterogénea en el mundo. Entre las principales causas  podemos destacar: la crisis de rentabilidad de la economía real, la crisis del petróleo, suba de las tasas de interés y el acuerdo plaza  1985, donde los países industrializados intervinieron el mercado de divisas. Lo importante es destacar como este contexto estuvo signado por el cuestionamiento de los sectores más conservadores acerca de la regulación keynesiana, del Estado de Bienestar de la y de la protección social. La política de la demanda/consumo para sostener el pleno empleo fue el blanco principal de estos sectores conservadores.

Este proceso detallado anteriormente dio lugar a un tipo de racionalidad política y social, articulada con la mundialización y la financiarización del capitalismo, donde la principal característica es el desacople de la economía real por una economía financiera y especulativa. Es importante aclarar esto para entender el fenómeno actual y el autor lo hace lucidamente a través de sus páginas.

El proceso se acentúa principalmente en la primera década del siglo XXI con el atentado de las torres gemelas, con la crisis de las punto com y  con el estallido de la burbuja financiera. Esta última fue alimentada principalmente por las inversiones financieras en empresas vinculadas a Internet, que, según el autor, dejó un tendal de empresas caídas y también una infraestructura digital en pie, que fue adquirida a precio “ganga” por los sobrevivientes. Desde lo político, los atentados a las torres gemelas alentaron a poner a todo el dispositivo de Sillicon Valley al servicio de la vigilancia y el ciber control.

Uno de los hallazgos de Galliano es que cuando se pregunta por la actualidad, se propone buscar lo que pasa en la realidad que rodea a la fábrica, entonces puede salir del concepto de industria 4.0 y   pasar al de capitalismo 4.0. La nueva racionalidad política económica y social potenciada por las tecnológicas, especialmente la informática, moldea un tipo de sociedad. Galliano socializa la pregunta, incorporando múltiples variables, además de las productivas, en términos económicos. Por eso puede arribar a reafirmar la idea de un paradigma tecnológico que es el sistema ciberfísico: la interacción entre:  la nube (la web), los usuarios y el uso de los datos de esos objetos (internet de las cosas), y la retroalimentación de la nube mediante algoritmos (big data) que tienen la capacidad de “aprender” dentro del ciclo y modificar su funcionamiento haciéndolo más eficiente. La intermediación de este circuito la dan las plataformas. Este es el paradigma de nuestra época, es “nuestra máquina de vapor o línea de ensamble”, alrededor de esto funciona la producción, la información, gran parte de nuestra comunicación y de nuestra vida social.

EL capitalismo 4.0 nace de todo este proceso: Internet para controlar personas y objetos, plataformas para bajar costos y startups, el emprendimiento de riesgo puro, para absorber capitales. Los gigantes tecnológicos del capitalismo 4.0 han desarrollado un modelo de negocios y control social fundado sobre la base de datos y algoritmos que se expande por todo el mundo.

Luego de esta detallada descripción el autor repasa las principales patologías de este capitalismo 4.0 tales como el malestar en el trabajo, el fin de la igualdad y el estancamiento del mundo. Porque este proceso debe verse con un trasfondo socioeconómico donde la sobreacumulación del capital con una economía estancada genera mayor liquidez financiera hacia el sector tecnológico, generando un “capitalismo burbujeante” ( puntocom, hipotecas, startups), donde la economía global crece menos que las ganancias de las empresas, por lo tanto a la precarización laboral debe sumarse la caída del salario mundial en un contexto de extrema desigualdad.

Por último, hace un intento por pensar futuros alternativos, apoyándose sobre principios muy sólidos como la disrupción tecnológica que sostiene que:  al no ser escasos los bienes tecnológicos, nos encontramos ante la posibilidad de expandir tecnologías para la producción y la socialización sin los clásicos límites de la escasez. Esta democratización posible para enfrentar al agotamiento material, lo lleva al autor a recorrer algunas de las ideas existentes acerca de la economía social solidaria y popular; la “innovación social” desde el territorio; el fenómeno denominado “decrecionismo”, el “aceleracionismo”, y “transhumanismo”.

* Gabriela Bazán es licenciada en Ciencia política y Administración Pública, docente y miembro de Mendoza Bits Banco de Iniciativas para la innovación Tecnológica y Social.

Si te interesa podes ver la charla que ofreció el autor  Alejandro Galliano, clickeando acá. 

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *